Nunca voló tan alto tu televisor

Un escenario sonoro de autopista se erige como frontera entre las realidades de una nueva ciudad en pleno desarrollo. En este contexto, se retrata la vida de una madre joven que se enamora de un edificio de quince plantas, así como la de un director de arte que, a través de su creatividad, busca dar vida a la Transición con una maqueta y un simple coche de juguete. Se entrelazan las historias de una niña obsesionada con el emblemático Pirulí, un presidente de una promotora inmobiliaria que enfrenta la sombra del pasado en tiempos oscuros, y una profesora de EGB que lucha por enseñar lo que se ha querido olvidar. Un arquitecto público se enfrenta a la magnitud de su obra, mientras que un barrio en construcción se convierte en el escenario de una lucha vecinal que perece en los momentos menos esperados. La narrativa se despliega como un universo de amores extraños y tensiones urbanas, donde la investigación y la imaginación se fusionan para captar la esencia de un proceso de construcción que no solo es físico, sino también emocional. Este relato revela la historia de un lugar que, bajo la luz de los televisores que brillan en la periferia, se convierte en el punto de partida para relatos que un día alcanzarán el estatus de leyenda, alzándose en el horizonte de una sociedad en transformación.